jueves, 12 de marzo de 2009

DE REGRESO A LAS CASAS.

En la actualidad nos hemos acostumbrado a dividir nuestra vida entre aspectos espirituales y seculares. Una división totalmente ajena a las enseñanzas de las Escrituras.
Dentro de esa lógica, construimos edificios de culto para Jesús en tanto que nos vamos a vivir a nuestras casas. De esa manera establecemos la separación entre lo que ahora llamamos la vida espiritual y la secular. La vida espiritual son las visitas que se hacen al edificio de culto en tanto que la vida secular es todo lo demás que se hace fuera de ese edificio.
En la iglesia de los primeros siglos no era así. La iglesia no tenía edificios para el culto sino que utilizaba las casas de los cristianos. Así, la iglesia estaba unida vitalmente con lo que se consideraba el centro de la vida: el hogar.
El regresar la iglesia a las casas es un importante paso en la comprensión de la verdad que Jesús debe estar en el centro de nuestras vidas de manera permanente. No podemos escabullirnos de él ni hacer nada que escape a su incumbencia. Él es el Señor de nuestra vida y no de un par de horas a la semana.
¿Le ha ayudado el trabajar con células a vivir esa verdad? Escriba sus comentarios en la parte de abajo, después de la versión en inglés.

Back to the houses.

At present we have become accustomed to divide our lives between spiritual and secular aspects. A totally unknown division from the teachings of the Scripture.
Within this logic, we build service’s buildings for Jesus while we go on to live in our houses. In that way we set the separation between what we now call the secular and spiritual life. The spiritual life becomes then, the visits made to the service´s building while the secular life is everything else that is done outside that building.
The first centuries’ church wasn‘t like that. The church had no buildings for the service, but used the houses of Christians. This is how the church was vitally linked to what was considered the center of life: home.
Returning the church to the houses is an important step to the understanding of the truth that Jesus should be at the center of our lives on a permanent basis. We can not sneak out of Him or do anything He’ll not care about. He is the Lord of our life and not of a few hours per week.
Has working with cells helped you to live out that truth?

1 comentario:

Anónimo dijo...

Que bendicion es leer esto; yo pertenezco a una iglesia celular y por lo que he leido miro que importancia es de que los lideres como pastores etc, rectifiquen esto con mas frecuencia ya que al saber esto hay mayor conprension del Evangelio de Nuestro Señor Jesucristo. Dios nos ayude! amen